Iglesia Parroquial de San Pedro de Torralba
La Iglesia Parroquial de San Pedro de Torralba de los Sisones se construyó para sustituir a la que había en el castillo. Se trata de una construcción de mampostería y cantería, con una única nave que se cubre con bóveda de crucería estrellada. Mantiene un estilo del gótico tardío. La cabecera es poligonal. La torre está a los pies, en la nave del evangelio. La portada está en el lado de la epístola y es un interesante ejemplo del manierismo.
Las obras comenzaron a partir de 1593 y estaban concluidas hacia 1601. El cantero Pedro Sastre, que aparece documentado en la localidad en el año 1594, fue uno de los que participaría en la construcción. En 1731 se había construido la nueva sacristía.
Torre
La torre de la Iglesia es una construcción de planta cuadrangular realizada en sillería. Tiene cuatro cuerpos escalonados, el primero de escasa altura, separado por una moldura del segundo. El segundo cuerpo es el que más altura tiene, llegando hasta el nivel de la nave central. El tercero es el de menor altura y se separa por una cornisa de la parte superior que hace de campanil, abierto a los cuatro lados por un arco de medio punto. En la clave de uno de los cuales aparece la inscripción: «IOANNES DE BORIA ME FECIT 1600″. El conjunto se remata con unos pináculos de cantería. Está situada a los pies en el lado del evangelio.
Plano de la iglesia
Elementos destacables de su interior
Entre los retablos cabe destacar los siguientes:
En la capilla mayor encontramos los retablos de San Pedro, San Miguel Arcángel y el Niño de la Pasión.
Bajo el coro, en el lado de la epístola, cabe destacar el retablo dedicado a la Virgen del Consuelo, gótico de fin. XV- pp. XVI. Completan el lado de la epístola las imágenes de San Isidro, San Lamberto y un Cristo, todos ellos del XVII, además de tres retablos dieciochescos bajo la advocación de las Almas del Purgatorio, Santa Quiteria y la Dolorosa.
En el lado del opuesto aparecen imágenes del XVII y del XVIII, agrupadas en los retablos de la Virgen del Pilar, Santo Cristo, San Ignacio y San Francisco, y el retablo de la Virgen del Rosario.
Destaca por su antiguedad la talla románica de la Virgen del Consuelo.
Retablo Virgen del Consuelo
Retablo Mayor